Sucesos

Un hombre irrumpe en una iglesia de Málaga y causa numerosos destrozos al grito de «¡Dios no existe!»

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David García de Lomana

La Policía Local de Málaga ha detenido a un hombre de 45 años por provocar numerosos daños materiales en la parroquia del Corpus Christi de Málaga, en el barrio de Pedregalejo, al grito de «¡Dios no existe!». El arrestado tiró al suelo figuras de Cristo y de la Virgen, que resultaron amputadas, además de varios cuadros, sillas, candelabros y un retrato del obispo.

Los hechos tuvieron lugar este pasado lunes a primera hora de la mañana, sobre las 9:30 horas, momento en que se oficia la primera misa del día. Con algunos feligreses ya en sus asientos, el hombre irrumpió en las instalaciones de la parroquia, en un salón de actos, profiriendo gritos y amenazas de muerte a los presentes.

Un aviso al 092 alertaba de un individuo en actitud violenta, emprendiéndola a golpes con todo lo que se encontraba a su paso. Dos feligreses trataron de retenerlo sin éxito y decidieron dar aviso a la Policía Local.

Ante la actitud agresiva y amenazante del individuo, una de las personas se vio obligada a salir de la iglesia, pero fue perseguida por el agresor. Ya en el exterior, el hombre fue arrestado por los agentes, a quienes manifestó que padece «problemas de salud mental y que no se acordaba de nada de lo que había pasado». El detenido fue trasladado a dependencias policiales mientras se investiga lo sucedido.

Desde el Obispado de Málaga precisan que ninguna de las personas que le hicieron frente resultó herida y, aunque los daños materiales son cuantiosos, «ninguno de estos objetos cuenta con valor artístico considerable».

En un vídeo difundido en redes sociales por el perfil Universitarios Católicos, el párroco de la iglesia, José López Solórzano, relata los destrozos en el templo tras el ataque: «Ha tirado sillas, cuadros, velas, candelabros, un micrófono y mobiliario en general. Se sobreentiende lo que ha pasado». A la imagen de la Virgen, en el suelo, le falta una mano. A la talla de Cristo crucificado, también en el suelo, le faltan las dos piernas. El valor de los daños superaría los 3.000 euros, según detalla SUR.

El párroco ha realizado ya un inventario de los desperfectos para presentar la denuncia. «No son piezas históricas, pero tampoco eran de escayola. Vamos a intentar restaurar todo lo que podamos», ha señalado. Lo peor, sin duda, «el mal rato que hemos pasado», lamenta. Este lunes arrancaba el curso pastoral 2023-2024.

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